jueves, 15 de noviembre de 2012

ya fue

oye disculpa, me encontré adentro todo lo que se supone te importa y no había nada más para limpiarme el culo, no lo ibas a usar pronto o si?

miércoles, 11 de julio de 2012

gritando

(...) y mientras se acercaba repetía: nosotr@s, l@s hij@s del auténtico matrimonio social: el disuelto, nosotr@s quienes crecimos cargad@s a un lado, que salimos invict@s del falocentrísmo de cuna, seremos quienes destronemos al patriarcado, y volverá a ser la mujer quién recupere el rol de la vida, "salgan y jueguen" decían, "ya pasó, ya pasó". El macho pierde el permiso para sus guerras, la sensatez vuelve a fluir como cuando dios era diosa: la sensación precederá a la razón.

martes, 12 de junio de 2012

en mi opinión (cover en prosa a los crudos)(sin censura)

yo pienso que es necesario que cada ser humano antes de hablar (o después) especificara un "yo pienso" o un "para mi" o "yo creo" o "en mi opinión" porque eso es lo que emite, su opinión sobre algo, nadie habla con la verdad absoluta, yo pienso.

mejor obviemos esto y recordemos que lo que nos dicen siempre es la opinión de quién emite, no una verdad, ahí veremos que hacemos al respecto desde nuestra perspectiva.

mejor no obviemos nada, nada es obvio! así de fácil entran verdades en nuestra mente, hay que dudar de todo, incluso de nuestras ideas.

domingo, 22 de enero de 2012

efectos colaterales de la luna llena #3

le damos color ah? le damos color por todo, nos creemos esta hueá como que fuera real, porque tiene que ser real po! cómo no va a serlo, onda toda la vida que vivo, las amistades, las costumbres, las cosas que veo o conozco, TODO debe ser real porque o si no cómo? pero esos caldos de cabeza, esas excepciones a la regla dicen lo contrario po, nos muestran que en realidad toda la mierda que conocemos no es más que una de infinitas miradas a lo inmirable, lo inimaginable, eso que en ninguna cabeza entra por más que tratemos, porque sólo somos una miserable perspectiva, una miserable interpretación de lo que aparece en nuestro presente, lo que miramos, olemos, escuchamos desde nuestra única perspectiva. Y a veces ni eso, sólo perspectivas ajenas, prejuicios sobre cualquier cosa. Vidas ajenas a lo que podríamos conocer. Evitando lo malo evitamos vivir. Ahora la tele nos arma la vida y ni el diccionario le gana (el diccionario que dice toballa y olorosar) y no dudamos de nada. Lo que nos comentan lo escuchamos como verdad absoluta, como si la verdad existiera, como si esto fuera verdad.