Reemplazan a uno de los monos que al momento de entrar va directo a los plátanos, recibiendo los golpes del resto de los primates. Reemplazan a otro que repite la historia, es golpeado por la manada y con especial motivación por el mono anteriormente reemplazado, y así van reemplazando uno a uno hasta que quedan cinco monos que nunca han sido mojados pero golpean a cualquiera que intente ir por los plátanos.
esta pequeña historia circula por internet y nos refleja tristemente en lo que nos hemos convertido, actuamos sin reparar ni pensar por qué se hacen así las cosas, las hacemos porque así han sido siempre.
El problema de la educación no es algo de este gobierno o del anterior como han repetido muchos dirigentes que aquí han hablado, llenándose la boca buscando culpables en los políticos de turno, los verdaderos culpables están tranquilos mirando todo desde lejos.
En la guerra fría el bloque capitalista financió gran parte de las dictaduras de sudamérica, educando en su filosofía a los economistas que trajeron el modelo económico que hoy impera (claramente no sólo económico). Así mismo, se creó una constitución que avalara todas las políticas privatizadoras y la protección a la empresa en general, pero eso no bastó para convertir a chile en el paraíso latifundista que conocemos, los medios de comunicación se encargaron de la otra mitad, ahora muchos han sido testigos en carne propia cómo en las noticias muestran una parte solamente de las movilizaciones, la parte fea. Por años la televisión nos ha impuesto qué pensar, la publicidad nos impone qué comprar de una forma descriteriada, usando los métodos aprendidos por el ministerio de la propaganda de la alemania nazi, cada comercial que vemos está creado estratégicamente en su totalidad para cumplir su objetivo, psicología del consumo, los colores del aviso, el tono de voz de la locución, el horario en que se transmite, etc. así mismo la programación está también pensada para mantenernos como una masa no pensante, carentes de crítica y motivados por el consumo.
De esta forma estas personas dueñas de chile, que se beneficiaron en dictadura y crearon las leyes para seguir haciéndolo hasta hoy, compraron canales, diarios, revistas y radios, acapararon grandes empresas estratégicas (colocolo, chv, lan por nombrar a uno de los dueños) todo con la intención de hacer de cada uno de nosotros consumidores de crédito y la felicidad material.
Y es acá donde nos tienen agarrados, podrán lograr que renuncie lavin, que se cree una reforma a la educación. que metan presos a los que han lucrado con el sueño de millones si queremos ser soñadores, pero esta historia se seguirá repitiendo mientras no cambiemos nosotros, si estamos exigiendo una reforma educacional, debemos replantearnos nosotros primero, darnos cuenta que este sistema nos crea una falsa meta de felicidad material, entrando a estudiar desesperadamente con la intención de ganar mucho dinero, aunque no me guste lo que estudie, el dinero podrá apagar la infelicidad que generará no hacer lo que me guste de por vida. Algo no calza.
La única solución para que se detenga el lucro indiscriminado es detener la demanda indiscriminada en todo sentido, comprar para llenar los vacíos que el mismo sistema crea, si logramos detener el consumismo que crearon en nosotros su enorme poder caerá por efecto dominó.
Acá no sacamos nada con buscar culpables, pero si quieren saberlo no es en la política, bueno este gobierno está cerca, pero una gran mitad de la culpa está en las pocas familias dueñas de chile, contadas con menos de una mano: matte, luksic, paulmann, piñera por nombrar algunos, la otra mitad somos nosotros que permitimos esto con nuestro consumismo, ahora conscientes tenemos la responsabilidad de hacer algo al respecto
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perdamos el miedo al dinero, el miedo al sistema y a su represión, que nos incluye como represores sin si quiera notarlo y no se olviden que las costumbres y leyes fueron hechas por personas añejas hace años, muchos de ellos ya muertos. Este es nuestro mundo, nuestro presente creémoslo nosotros y paremos de ser observadores, destruir para construir algo nuevo!
